Aunque el recinto no parecía el sitio adecuado para un concierto (se trataba de un enorme descampado en un hipódromo al lado de un casino, y con poca asistencia de público), la actuación de ayer de Bruce Springsteen & The E Street Band en Vernon fue soberbia, y el artista ofreció un set list repleto de temas de toda su carrera, incluyendo los estrenos de «Human Touch» y «Stand on it». A juzgar por el repertorio, el de ayer parecía más un concierto de una segunda noche. Arrancó la noche con «Out in the Street», seguida de una ristra de peticiones del público que incluyó las trepidantes «It’s Hard to Be a Saint in the City» y «I’m a Rocker». Siguiendo el estilo de los recientes conciertos en Boston, recuperó «Darkness on the Edge of Town», «Frankie», la versión swing de «Open all Night» y la versión de 1978 de «Prove it All Night», además de una larga «Backstreets» (con fragmentos de «Dream Baby Dream» en su parte central).
Los bises incorporaron «Rosalita» y la sensacional «Quarter to Three», antes del cierre con «Twist and Shout», tras tocar 30 canciones durante tres horas y treinta y cinco minutos. La próxima parada es Filadelfia, uno de los templos de la springsteenmania desde los inicios de su carrera, donde tocará el domingo y el lunes.