Los fenomenales conciertos de estos últimos días hacían predecir que Springsteen se despediría de Europa a lo grande. Desde aquel concierto inicial en Sevilla el pasado 13 de mayo Springsteen ha dado 33 conciertos en Europa, y la despedida en Helsinki superó toda expectativa. Bruce Springsteen y la E Street Band tocaron ayer durante 4 horas y 6 minutos, ofreciendo así el concierto más largo de su historia (el mito de sus conciertos de 4 horas es, ahora sí, realidad). Por si fuera poco, a las seis y media de la tarde (hora y media antes de la hora oficial), y con un tercio del público ya en el estadio, Bruce salió al escenario con una guitarra acústica y ofreció un mini-concierto de media hora, con «I’ll Work For Your Love», «Leap of Faith», «No Surrender», «For You» y «Blinded By The Light».
Fue un acto de agradecimiento a sus fans más fieles. Al acabar bajó hasta la primera fila y estuvo diez minutos encajando manos, charlando, firmando autógrafos y recogiendo carteles con peticiones, para después despedirse desde el escenario dando gracias a todos los fans que siguen la gira. Si sumamos esta media hora de actuación previa sale un total de 4 horas y 36 minutos de actuación en Helsinki.
Pero no todo son cifras y duración. El secreto del artista reside en su enorme capacidad de comunicación y entrega sobre un escenario, y eso no falló en Helsinki, sino que fue superlativo. El concierto «normal» empezó con «Rockin’ All Over The World», el rock trepidante escrito por John Fogerty y que tantas veces ha servido para poner cierre a sus actuaciones, seguido por ese trallazo rock llamado «Night», la eficaz «Out in the Street», y dos joyas: «Loose Ends», siempre apabullantemente hermosa, y la versión del 78 de «Prove it All Night».
Y el concierto duró y duró, y llegaron «Does This Bus Stop at 82nd Street?» (poco frecuente en la gira europea) y «Be True» (el set list original, que Bruce modificó sobre la marcha, incluía «Factory», «Point Blank» y «Candy’s Room»), las siempre bien recibidas «Downbound Train» y «Because the Night», los estrenos de «Light of Day» y «Back in Your Arms» (un temazo soul que se prodiga poco), y una racha de bises extremadamente larga e intensa, con el retorno del «Detroit Medley», el duo entre Bruce y Steve en «I Don’t Wanna Go Home» (canción de Van Zandt que hizo famosa Southside Johnny, aquí interpretada sin banda, acompañados sólo de sus guitarras), ese obra maestra que es «Higher and Higher» (del gran Jackie Wilson), y un bis extra con «Twist & Shout» en pleno delirio, en una noche sin fin que culminó una ya inolvidable gira europea.
24 horas después del concierto la web oficial del artista ha publicado una nota de agradecimiento del director de la gira, George Travis (con datos curiosos sobre la misma) y una galería de fotos del concierto, así como un autógrafo del propio Springsteen dando las gracias a todos sus fans europeos.