Doble ración de vídeos oficiales de los recientes conciertos en Florida.
La reivindicativa «Joe Hill», escrita por Earl Robinson en 1938, y una furiosa versión de la revolucionaria canción de los Clash «Clampdown», un himno contra la represión.
Con motivo del 20 aniversario de la gala «Embajadores por la Humanidad», organizada por la fundación USC Shoah, Bruce Springsteen cantó ayer dos canciones («The Promised Land» y «Dancing in the Dark», en formato acústico) y compartió mesa con Barack Obama y Steven Spielberg.
Durante el photo-call Springsteen y Spielberg se dedicaron a ‘sabotearse’ uno al otro. Antes de la actuación Spielberg calificó a Bruce de «el poeta lírico más trabajador de la nación en favor de nuestra común humanidad. Creo que cualquiera que tiene un jefe desea que fueras tú».
La USC Shoah Foundation Institute for Visual History and Education fue fundada por Steve Spielberg en 1994 y se dedica a hacer entrevistas audiovisuales a testigos y supervivientes del Holocausto y otros genocidios para que sirvan como herramienta educativa.
Otra noche a recordar en esta gira 2014. Springsteen dio un concierto de alta intensidad en su retorno a Houston. La entrada con «Seeds» marcó la pauta de la noche: rock y más rock, enlazando «Badlands» con «Adam Raised a Cain» y «She’s The One», «Night» con «No Surrender», «Born to Run» con «Rosalita» o esa colaboración con el tejano Joe Ely en los bises: «Great Balls of Fire» y «Lucille». Puro rock’n’roll.
Punto y aparte fueron las baladas y medios tiempos, con el estreno de la soberbia «One Step Up», del infravalorado Tunnel of Love, y una versión especial de «Backstreets», con el interludio «Sad Eyes» cada vez más extenso.
La sorpresa de la noche fue el estreno de «All Or Nothin’ At All», del olvidado Human Touch, una canción que ha tocado sólo en 8 ocasiones, todas en 1992 excepto una en un concierto en Tampa en 2009.
Era la tercera vez que Bruce Springsteen tocaba en el festival de jazz de Nueva Orleans, y de nuevo bebió de las raíces de la música americana para dar forma a un concierto con sabor a folk y tradición.
Junto a sus clásicos de rock incorporó tres canciones del disco We Shall Overcome, The Seeger Sessions: «Jesse James», «O Mary Don’t You Weep» y «Pay Me My Money Down», contando con la participación especial de Rickie Lee Jones. Añadió además sus estupendas versiones de «How Can a Poor Man Stand Such Times and Live?» y «When the Saints Go Marching In».
En los bises un clásico entre los clásicos subió al escenario: John Fogerty, líder y compositor de los míticos Creedence Clearwater Revival, quien cantó «Green River» y «Proud Mary» con Bruce y la E Street Band.
El homenaje a la tradición musical de Nueva Orleans continuó después: tras tres horas de concierto Springsteen se desplazó al teatro Saenger para abrir el concierto del gran Dr. John, cantando a duo «Right Place Wrong Time» con él. El concierto se grabó para posterior edición.
En el concierto en Tampa (Florida) el de Nueva Jersey mezcló temas habituales de la gira con territorio hasta ahora inexplorado este año, repescando canciones de las Seeger Sessions, sin duda pensando ya en el cercano concierto en Nueva Orleans.
«Jesse James» y «O Mary Don’t You Weep» hicieron su debut en la gira. La temática folk se completó con «Brothers Under The Bridge» (outtake de The Ghost of Tom Joad que no tocaba con la E Street Band desde el segundo concierto en el Palau Sant Jordi en 1999) y «Pay Me My Money Down», además de «Joe Hill», el reivindicativo tema de Earl Robinson (también popularizado por Pete Seeger) con el que abrió el concierto.
Pero hubo también tiempo para el rock, con electrizantes versiones de «Clampdown», «The Ties That Bind», «Candy’s Room», «Darkness on the Edge of Town», «Night», «From Small Things», «Gloria» o «Light of Day», cada vez más habitual como cierre antes de los bises.