Ayer Clarence recibió un merecido homenaje en su ciudad natal de Norfolk, Virginia. El saxofonista de la E Street Band ya tiene su nombre en una estrella en la acera de Grandby Street, junto a las de otras leyendas de Norfolk como Bruce Hornsby o la mítica Ella Fitzgerald. Tras el homenaje se celebró un concierto en el Roper Performing Arts Center, donde Clarence también participó.