Bruce Springsteen volvió a la tierra de sus bisabuelos, los Zerilli, procedentes de Vico Equense, un pueblo de la zona de Nápoles. Algunos de ellos, familia de la madre de Bruce, incluso acudieron a este concierto en la Piazza del Plebiscito de Nápoles. Bruce sorprendió a los más madrugadores con un set acústico compuesto por «This Hard Land» y «Growin’ Up», antes de regresar al escenario una hora después con la E Street Band y arrancar de nuevo con «Long Walk Home» y «My Love Will Not Let You Down». Previamente Nils, Charlie y Roy tocaron «O Sole Mio» al acordeón.
De entre los muchos carteles con peticiones Bruce escogió en esta ocasión «Rosalita», una canción que nunca ha tocado en medio de un concierto sino como cierre del mismo o en los bises. Una posición inusual para un tema ya poco frecuente en sus conciertos, pero siempre excitante como el primer día. Le siguió «The River», espléndida, una furiosa «Prove it All Night», con la introducción de 1978 incluida, «Radio Nowhere» y «The Promised Land», ya con la lluvia cayendo sobre el público. Más tarde sonó «Who’ll Stop the Rain?» y la lluvia paró.
Como primer bis Bruce ofreció «My Hometown», en reconocimiento a sus ancestros. Tras los bises habituales y una larga «Twist and Shout», Bruce reapareció en el escenario para despedirse cantando una versión en solitario de «Thunder Road» que resonó con intensidad por toda la plaza.